¿De qué sirve tener muchas herramientas de bricolaje y accesorios de ferretería si no somos capaces de encontrarlos cuando los necesitamos? ¿Eres de los que va a la ferretería a comprar lo que necesita a sabiendas de que en algún sitio está lo que buscas? Organizar las herramientas de bricolaje es imprescindible pues de lo contrario de poco sirve tenerlas.
Existe una gran variedad de productos que permiten almacenar todos los elementos y localizarlos con facilidad. Desde cajas y compartimentos tipo taller móvil hasta completos organizadores apilables o de pared. Los hay de muchos tipos: para tornillería y pequeños accesorios o para herramientas grandes como el martillo percutor o las amoladoras angulares. Aquí te dejamos algunas ideas para que organices tu garaje o tu trastero.
Estanterías de bricolaje para pared: perfectas para clavos, tuercas y otros elementos pequeños
Este tipo de estanterías o gavetas son una de la solución más efectiva para guardar y localizar con fácilidad la inmensa cantidad de pequeñas piezas que cualquier aficionado al bricolaje acaba acumulando con el paso del tiempo.
Tuercas, tornillos, clavos, alcayatas, bisagras, brocas, tacos, espigas, remaches, brocas, puntas de destornillador…. La lista es interminable. No obstante la solución es muy sencilla. Si ponemos cada elemento en una gaveta del tamaño adecuado y rotulamos su contenido—si es que no queda a la vista—los encontraremos sin dificultad cuando sea necesario.
Otra opción son los maletines con casillas. Aunque son también efectivos presentan un inconveniente: las piezas están menos a la vista y se tarda más en escoger lo que se precisa. Sin embargo tienen una importante ventaja: son transportables y nos podemos llevar parte del taller a donde sea con poco esfuerzo.
¿Dónde guardar las herramientas de mano?
Ahora que tenemos las tuercas y tornillos en su sitio ¿dónde guardamos la herramienta de mano? En esto las dos soluciones más utilizadas son la clásica tabla atornillada en la pared y los paneles perforados con ganchos insertables. La primera opción es efectiva. Se coge una tabla de aglomerado, madera o contrachapado y atornillamos o clavamos varios soportes para cada una de las herramientas de mano. Una vez que tengamos la tabla fija en la pared con un rotulador permanente dibujamos la silueta para saber dónde va cada cosa. Es una solución efectiva y económica. Sin embargo presentan un inconveniente: la dificultad que supone el realizar modificaciones. Aquí es donde cobra sentido el uso de paneles perforados.
Estos paneles perforados se atornillan a la pared. En cada uno de sus orificios podemos ubicar los soportes y ganchos para la herramienta. Es por ello que realizar modificaciones resulta fácil y sencillo. En cualquier caso con ambos sistemas lo más conveniente es ubicarlos justo encima del banco de trabajo. Así tendremos toda la pequeña herramienta siempre mano.
Organizar las herramientas de bricolaje: estanterías o taquillas para las herramientas eléctricas
Finalmente, sólo nos queda buscar un espacio para la herramienta eléctrica más voluminosa. Por ejemplo, la lijadora, el taladro o la radial. Podemos optar por estanterías modulares, taquillas metálicas o armarios de resina.
Con la ayuda de estos accesorios podremos organizar las herramientas de bricolaje y tener todo en su sitio.